No vale

Es un domingo triste este. Es de adioses, de incertidumbres y miedos. Adioses grises como este domingo de junio. Vengo de estar con alguien que se está yendo, se está dejando ir sin explicaciones y porque sí nomás. Se colgó de una sonrisa inventada para los otros. Tiene palabras escondidas que no puede dejar salir. Alguien que tiene frío no solo a causa del invierno y las nubes. Tiene las nubes en su corazón y el pensamiento lejos de acá. Ya no le alcanzan las cuerdas que le podamos tirar, simplemente, no las quiere asir. Entre tanta nube tiene una certeza: ya no vale la pena. Lo decretó. Es un triste y desacompasado domingo con grises que abruman. Es domingo de letras tristes que no se saben despedir, no encuentran el cómo, porque se resisten a entender los motivos de las partidas. Se resisten estas letras y mi cabeza a creer que no hay mis ganas ni mi voluntad porque no alcanzan para continuar por un camino que ya no se quiere andar. Se me ha metido un frío a...