Solo para molestar a Rubén
El Facebook está lleno de famosas y famosos. Un día te armás un perfil. Para empezar, un perfil bajo y baja, o de poca estatura. Empezás a buscar gente conocida o conocido y a los dos meses tenés trescientos cincuenta mil amigas y amigos. Y ahí nomás ya sos famosa o famoso. Si tenés dos gramos de chispa, si leés las noticias y elegís alguna que “pague la pena”, como decía mi abuela -y mi abuelo consentía- ya está…la gente te busca o te busco y quiere ser tu amiguita o amiguito. Como vos recién vas arrancando y te da seguridad ver que existen seres humanas y humanos a quienes les parecés interesante, les das “agregar” a todo el mundo y a la munda también. Tu ego fortalecido, y tu EGA… te lleva a Chile en Semana de Turismo o de Turisma (si existiera o existiese), con plata…la vida es así de fácil. También y de a poco te vas avivando que podés agregar otros valores a tu perfil, siempre con el cometido y cometida de ser famosa y famoso. Por ejemplo, colgarás fotos que no serán...