Creer en anclas



¿En qué vaso ahogo tu recuerdo?
¿En qué timidez me puedo cobijar?
¿En qué sitio de la nostalgia me puedo sentar a llorar lo que tengo para llorar?
¿En qué esquina te puedo encontrar sin cita previa?
¿En qué azul se resguardará la esquina?
¿En qué atardecer veré tus ojos o en qué lluvia?
¿En qué espacio me asusto del tiempo que se amalgama en memoria?
¿En qué sentido te dirigís para retenerme?
¿En qué lunar termina tu sonrisa y empieza tu lágrima?
¿En qué congreso aprenderé que el desayuno es café con leche y bruma?
¿En qué vida encontraremos un hotel que nos albergue?
¿En qué tarde perderé la voz y me despertará el grito?
¿En qué otoño te voy a esperar desabrigada?
¿En qué refugio nos vamos a juntar?
¿En qué playa nos quejaremos del viento?
¿En qué espejo nos vamos a mirar y en qué laberinto a perdernos?     
¿En qué casualidad?
¿Con qué mirada de castillo firme, con qué voz de gorrión dormido, con qué ancla?
¿Con qué ancla?
¿Con cuál ancla?

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