Locas letras el día de mi cumpleaños

Hoy cumplo años. Un montón.
No tengo lifting, ni bótox, ni rellenos, ni hilos tensores… ni plata para ponérmelos.
No voy a un spa, porque si no “spa-todos” no es pa’mí.
No hago dieta porque me puede el chocolate en invierno, los helados en verano, el pan fresquito de la panadería los sábados de mañana, los panqueques con dulce de leche que yo sé hacer y los guisos que me cocina Charly.
No me persigo con la moda en el pelo: hace tiempo que me hago "progresivos" pero el alma sigue igual de enrulada y desgreñada.
No soy joven ni a palos pero… padezco y encaro el síndrome de Peter Pan con la frente en alto. Alta y amplia la frente. Siempre.
¡Y no paro de cumplir años! ¡Seradedió!
En este montón de años cronológicos que cumplo, como máximo, en el ánimo tengo 20. Always a teen.
No es que sea inmadura, lo que soy en el fondo, es una gran colgada (en el fondo y en el frente de mi casa, también).
Sobre el punto, me río de Janeiro y …hablando de lugares, aprovecho y les cuento que esta noche me voy de viaje con mi hija.
Festejar un cumple o irse de viaje (con 80 años o con 20) puede ser una maravilla o un desastre completo, dependiendo de la onda que se le ponga y de las ganas que se tengan de estar presente y transitar.
Yo, siempre he sido y seré “quiero y puedo”. Yo gano batallas. Y si no gano, empato. Y si ni gano ni empato, pierdo. Y cuando pierdo, reflexiono y me fortalezco.
No veo otra forma de estar en el mundo y tener ganas de pelearla a esta edad avanzadita que estoy teniendo.
A todos los quiero, señoras y señores, amigos y de por acá. Porque el mundo será binario, pero mi pensamiento ¡jamás!
Todos ustedes son importantes, en mi muro de FB o en mi TL de Twitter, todos están a diario para decir algo, para soltar cosas, para demostrar que la reman, para involucrarse, para declarar fuertemente y para compartir el vértigo que es la vida. A veces me importunan, otras veces vienen al rescate. Pero lo principalísimo es que muchísimas veces, me sostienen.
Me viene a la cabeza: “repartiré, repartiré, sólo al que ama y al que arde”, de una canción de Silvio.
Y es así. Por suerte, acá, (casi) todos amamos y ardemos.Por eso ahora que tengo un rato para estar por acá, reparto saludos sin lástima a los amadores de la vida que se la pasan ardiendo, a los que me saludaron con cariño y aprecio y a los que no. Everybody.
Al puñadito de gente linda que me acompaña y banca a diario, gracias por estar hoy conmigo, pero más gracias por estar siempre. Hasta la victoria Secret.