Un Mundial sin "waka waka"...

¡Y pensar que en el Mundial pasado yo no paraba de escribir notas y era casi una “revelación” de las letras mundialísticas/futboleras en las redes!

“Todo tiempo pasado” ya fue, mija. La realidad, golpea.

Hoy  me hallo (no dije “acho”, dije “hallo”, tá?) calladita…reflexiva, casi.

¿Analizo mis ilusiones y las comparto con mis compatriotas o me hago cargo de las contingencias?

Me hago cargo y tá. I am a loser. Seh, I am. A loser con la frente en alto, quétanto.

Ya volvió mi selección, la celeste, no estuvo a la altura de las expectativas, es cierto, pero se dio algunos gustos. Mandó pa la casa a italianos e ingleses. La peleó con Colombia, con el golero ése que es como un alien magnetizado, con James que como todos los uruguayos sabemos: “si es James, es bueno”; nuestro pueblo lloró, gimió, protestó y hasta puteó desde la boca del mísmisimo presidente de los orientales  contra la FIFA y los acomodos y se la jugó por Suárez, chiquilín sin ortodoncia ni disciplina, que terminó dejándonos repegados porque tuvo que pedir disculpas o “andá a jugar al campito y hacete un jugo de naranja, salteño”. Tá bien igual…cosas que pasan.

Qué mundial sin “waka waka” éste, che. Un bajón.

Acá estamos, frente a un panorama casi tenebroso, viendo cómo siguen jugando los otros y nosotros en casa, siempre protestando y alentando a alguien, faltaba más…¡porque no nos vamos a bancar los partidos y el furor siendo nosotros, parias del destino y sin opinar! ¡Eso no es de buen/a uruguayo/a! Los uruguayos y las uruguayas SIEMPRE tenemos algo para decir, sacás?

Así que yo fui por Colombia, aunque hace una semana mi discurso estaba en las antípodas y había dejado de tomar café pasándome al té mixto y ni por las chapas pensaba en el Gabo que adoro, o en la bella Shakira que menea la cadera como nadie.

Es lo que tiene el fóbal. Ambivalente se vuelve una.

Hoy hinché por Colombia. Reivindiqué el café, Macondo en su máximo esplendor y el giro de caderas de la rubia…si a fin de cuentas, yo casi nunca “me baño los domingos”, just like her.

Marchó Colombia.

Pero serádedioooo…

Soy tan loser que ni les conviene que yo ponga el ojo en ustedes a riesgo de que terminen en el rincón de las arañas!

Y bueno, ahora voy por Argentina. Por cercanía, porque la mitad de mi vida o mejor quizás la mitad de mi alma, es del lado de enfrente del charco y…hasta miedo me da decirlo, no sea cosa que sea yo taaaaaaaaan loser, tan mala onda, que de puro ser loser y en estos últimos días, loser y outsider…de tanto querer ser “in” en este Mundial en el que estamos “out”…termine yo, sin querer, prendiendo hogueras ajenas o viendo por la tele dudosas jugadas que parten vértebras…lo cual me provocaría, seguramente, soñar con Blatter…a quien no quiero yo juzgar porque no sé…pero su cara y postura, por más suizo que sea, no me remite a chocolate, que es precisamente, de las cosas que más me gustan en la vida. Más bien me suena a carita de evangelizador, personas de las cuales, desde el principio, “DESCÓNFIO”. Y paso!

En este Mundial, me faltan hazañas. Me faltan glorias. Lo que no me faltan es ganas de participar.

Seh, ya sé…del otro de la línea, siempre habrá alguien dispuesto a decir: “gracias por llamar, seguí participando”, como quien dice “arrancá por la punta, botija”.

Y buéh…otros mundiales habrá que nos harán buenos, exitosos, triunfantes, orgullosos, festejantes… y muy pero muy uruguashos con “sh”. Recordemos que todavía nos queda a un clic del control remoto, nuestra ♪♪ "Natalia Oreirooo celeeesteeee" ♪♪. Algo es algo, bo.

Qué Mundial pal psicoanálisis. Mamitaquelotiró.